RyP saluda a los Trabajadores de la Salud
Un nuevo aniversario del día del trabajador, nos encuentra a la gran mayoría de nosotros, con remuneraciones inadecuadas y escasas, condiciones laborales cada vez más deterioradas, sin tiempo ni recursos para perfeccionarnos y con la necesidad de trabajar muchas horas y en distintos sitios para poder sobrevivir y cubrir nuestras necesidades básicas
Los médicos, en general, no nos vemos como trabajadores asalariados, debido probablemente, a una formación profesional liberal, que corresponde a épocas muy anteriores, en las que nuestra figura tenía una ubicación social de preeminencia y expectativa. Esta concepción es la raíz de nuestra resistencia a asumirnos como asalariados y por ende, agremiarnos y organizarnos para reclamar lo que, por derecho, nos merecemos.
El “mercado de la salud”, relacionado con la tecnificación de la Medicina y la aparición de grandes instituciones comerciales, tiene al médico en calidad de “prestador”, casi sin categorización profesional. En la actualidad, a raíz de su ingreso a este mercado laboral, el médico se ha transformado en un engranaje intercambiable con muy pocos derechos y numerosas obligaciones.
Trabajamos más horas semanales que en muchas otras áreas.
Trabajamos “gratis” para capacitarnos y especializarnos.
Trabajamos en condiciones riesgosas, insalubres y sin instalaciones adecuadas.
Trabajamos durante 24 horas, realizando guardias, situación difícil de encontrar en otra actividad, fuera de la de los profesionales de la salud y en condiciones, muchas veces deplorables…. pensemos unos segundos en los reclamos más comunes de las guardias: sábanas, comida decente, toallas, baños e instalaciones con agua caliente y sin goteras, entre otras.
Nuestros sueldos están entre los más bajos, la hora médica vale muy poco, tanto en el ámbito estatal como en el privado.
La teoría de que el médico acepta sueldos vergonzosos en los Hospitales porque tiene otros trabajos privados bien remunerados, es hoy en día insostenible, aunque lamentablemente algunos la siguen sosteniendo.
En el trabajo “privado” los médicos somos asalariados encubiertos.
Trabajamos en negro para obras sociales y prepagas, que fijan nuestros honorarios como quieren, nos pagan cuando les parece y no nos reconocen los derechos básicos de cualquier trabajador: aguinaldo, vacaciones, licencias por enfermedad o maternidad, indemnización, en caso de despido.
Nuestra resistencia a sentirnos trabajadores y a reclamar como tales nuestros derechos, es la causa de este estado de cosas.
Necesitamos más compromiso gremial, más democracia sindical, con debates, asambleas y participación de la gente.
Necesitamos gremios fuertes que no teman tomar medidas de fuerza para llevar adelante nuestras demandas.
En la reciente paritaria, cuyos números están muy lejos de nuestro justo reclamo, se aprobó la propuesta del GCBA, sin más “presión” que un declamativo “estado de alerta y movilización” por parte de nuestro gremio.
Cabe preguntarse qué hubiéramos obtenido si desde la AMM se hubiesen promovido verdaderas medidas de fuerza. Estamos convencidos de que lo que se obtuvo, no fue aun menor, porque hubo distintas movilizaciones en algunos hospitales.
Por todo esto como trabajadores de la salud, debemos hacer nuestro, el 1º de mayo….el camino es continuar con el protagonismo y la participación, en defensa de nuestros derechos.